Ahora que ya estás un poco familiarizado/a con la universidad y con el nuevo ambiente a tu alrededor, es tiempo de planear un poco tus estudios. El objetivo es ayudarte a ti mismo para que la experiencia no sea estresante, sino que al contrario disfrutes tus estudios y tengas más tiempo de convivir con más gente con la confianza de que la parte académica está cubierta.
- Haz un calendario físico, de actividades diarias.
La vida universitaria no es tan estructurada como la preparatoria. Hay días en los que tendrás más tiempo libre que en otros. Si eres estudiante de Maestría o Doctorado, se espera que tú mismo organices la mayoría de tus actividades con algunas cuantas materias reglamentarias. Por lo anterior es importante que tú mismo te organices desde un principio. Revisa tu calendario cada día y renuévalo cada semana para asegurarte que no te atrasas demasiado.
- Planea de manera inteligente.
La mayoría de las clases universitarias están planificadas para requerir aproximadamente tres horas de trabajo por semana por crédito en el curso. Al multiplicar su carga de crédito por tres, puedes tener una buena idea del tiempo que debes dedicar a estudiar además del tiempo que pasas en clase. Dependiendo de tus habilidades, habrá materias que solo requieran una o dos horas extras. Asegúrate de atender las materias que te resultan más difíciles primero.
- Deja cierta cantidad de tiempo libre en caso de improvistos
La falta de flexibilidad es una de las principales razones por las que los estudiantes no siguen un calendario de actividades. Haz tu calendario y cúmplelo. Recuerda que normalmente se necesitan 30 días para establecer un hábito. Considera que en esta nueva etapa tu eres responsable de cumplir los objetivos que tu mismo te fijas. No te desanimes si las cosas no van de acuerdo con el plan a la primera.
- Crea hábitos de estudio.
Esto es sumamente importante. Determina un lugar en tu dormitorio o en la biblioteca como área de estudio. Saber qué y cuándo vas a estudiar te ahorra mucho tiempo al tomar decisiones. Trata tu tiempo de estudio como lo harías con una clase: no te lo pierdas a menos que estés enfermo, tengas una emergencia familiar, etc. Debe ser una parte permanente de tu rutina diaria.
- Estudia lo antes posible después de cada materia.
Estudiar una hora poco después de la clase te servirá tanto para desarrollar la comprensión y la memoria de los materiales varias horas o días después. Si puedes, copia las notas mientras aún están frescas en su mente. Empieza a hacer tus ensayos mientras tu memoria de la asignación aún está fresca. Al hacer esto, será más fácil transferir información de la memoria a corto plazo a la memoria a largo plazo.
- Estudia máximo dos horas continuas.
Después de estudiar de 1 a 2 horas tu mente comienza a cansarse rápidamente y tu capacidad de concentración disminuye. Toma un descanso de 10 a 15 minutos y luego cambiar a otro curso. Estudia las materias difíciles cuando tu mente esté más descansada. Para algunos estudiantes, es por la mañana; para otros es al final de la tarde.
- Utiliza las horas entre clases.
Las horas libres entre clases se desperdician fácilmente. Si las utilizas para estudiar la clase que acaba de terminar, tendrás como resultado tiempo libre para recreación y otras actividades en otros momentos de la semana. Aprovecha las horas del día. Las investigaciones muestran que lo que se puede lograr en una hora durante el día puede tomar una hora y media durante la noche.
- Toma notas abundantes durante las clases o durante tu investigación bibliográfica.
Unas notas claras y abundantes son la mejor base para estudiar. Pon atención a las ideas clave en las conferencias y trata de expresarlas con tus propias palabras en tus notas. Puede ser útil ponerles la fecha y numerar las páginas.
En el caso de estudiantes de Maestría o Doctorado, elaborar fichas de trabajo es esencial para bosquejar la tesis más tarde en el curso.
Este nivel de organización te puede parecer abrumadora al principio, sobre todo si no estas estudiando una Maestría o Doctorado. Sin embargo, es el camino más sencillo al éxito. Puedes contar con la experiencia de Wittington para ayudarte con más herramientas u orientación personalizada. Nuestros expertos están disponibles a todas horas para atender tus dudas.
